MANO ZOMBI
13.10.2025
La Mano Zombi Comestible es un platillo salado, aterradoramente delicioso y visualmente impactante, ideal para sorprender a tus invitados en fiestas temáticas. Esta receta recrea una mano humana en estado de descomposición, hecha con carne molida sazonada y moldeada a mano para simular huesos, venas y piel podrida. Acompañada de salsas que imitan sangre o pus (como kétchup picante o mayonesa de ajo), esta receta es tan macabra como sabrosa. Se hornea hasta quedar crujiente por fuera y jugosa por dentro, logrando un efecto visual que hace que nadie quiera mirarla... pero todos quieran probarla.
INGREDIENTES:
- 400g de carne de ternera picada
- 1 cebolla morada
- 1 zanahoria pequeña
- 1 trozo de calabacín
- salsa de tomate
- queso en lonchas
- pure de patata
- sal
- aceite
- pimienta
PREPARACION:
- Primero cocinamos un poco las verduras. Así nos quedará más jugosa la carne
- Picamos muy pequeño media cebolla y rallamos la zanahoria y el calabacín pelado
- En una sartén con muy poco aceite y una pizca de sal lo ponemos a pochar todo junto unos 10 minutos, teniendo cuidado de que no se queme
- Mezclamos la carne con la verdura, sal y un poco de pimienta.
- En una fuente que sea válida para el horno, vamos haciendo la forma de la mano
- Es fácil, tan sólo hay que tomar como ejemplo... nuestra mano. La vamos poniendo encima para ver el tamaño y las proporciones, intentando que quede lo más realista posible.
- Con una capa exterior de la cebolla hacemos las uñas y las colocamos en su sitio.
- Con un trozo del centro de la cebolla, hacemos el hueso de la muñeca. Lo ponemos hacia arriba para que se vea blanco
- Con ayuda de un pincel cubrimos toda la superficie de la mano con salsa de tomate.
- Cuidado de no pintar las uñas. Las retiramos, pintamos, y volvemos a colocarlas. Después cubrimos más o menos toda la superficie con queso en lonchas.
- Ponemos la mano en el horno (la de mentira, no la nuestra) unos 15 minutos a 170 grados arriba y abajo
- La cubrimos con papel de aluminio para que no se tueste demasiado, separado de la mano con un palillo, para que no se pegue el queso.
- Pasado este tiempo, retiramos el papel y horneamos otros 10 minutos.
- Lo sacamos del horno, volvemos a pincelar con tomate y lo volvemos a meter, esta vez a gratinar, hasta que tome el color que queremos
- Cubrimos el fondo de la fuente con puré de patata rodeando la mano, con ayuda de una manga pastelera.