HELADO DE NATA Y NUECES
El helado de nata y nueces es un postre cremoso y delicioso, ideal para los amantes de los sabores suaves con un toque crujiente. Su base de nata aporta una textura rica y aterciopelada, mientras que las nueces troceadas ofrecen un contraste crocante y un sabor ligeramente tostado que complementa perfectamente la dulzura del helado. Es una opción elegante para servir al final de una comida o para disfrutar como un capricho refrescante en cualquier momento.
INGREDIENTES:
- 300g de nata para montar bien fría
- 150g de leche condensada
- 100g de nueces peladas
PREPARACION:
- montar la nata con ayuda de unas varillas eléctricas.
- Recordamos que la nata tiene que estar bien fría, y si el bol y las varillas con las que vamos a montar la nata también están frías, mucho mejor
- Incorporamos la leche condensada poco a poco mientras la vamos integrando con una espátula para que la nata no se baje.
Para hacer el helado casero más ligero, siempre podemos usar leche condensada sin azúcar.
Troceamos las nueces y las añadimos a la nata montada.
Mezclamos con la espátula suavemente pero integrando bien.
Vertemos la nata con nueces en un recipiente apto para el congelador
y lo guardamos en el congelador al menos 4 horas.
Durante las dos primeras horas, y en intervalos de media hora, sacamos el helado del congelador y lo removemos con una cuchara metálica
De esta forma, nos quedará un helado de nata mucho más cremoso.